Diseñada por los arquitectos Ignacio Urquiza Seoane y Bernardo Quinzaños Oria, del Centro de Colaboración Arquitectónica (CCA). El proceso de diseño llevado a cabo explora la relación entre el desarrollo del vino, el sitio, el usuario y el principal material en uso: el tepetate colado, el cual efectivamente completa las necesidades requeridas en el programa.
El proyecto trabaja la vinculación entre el sitio y las necesidades particulares de los procesos de producción del vino, enfocándose en el material y la estructura en dónde puede contenerse. Al lidiar con estructuras independientes
La vinícola ha sido acreedora de diferentes premios, como lo son:
Mejor proyecto industrial en la Bienal de Arquitectura de la Ciudad de México
Iconos del Diseño Mexicano por la revista Architectural Digest
Medalla de plata en la XIII Bienal de Arquitectura Mexicana